La escultura en las culturas Azteca, Maya e Inca.

La escultura Azteca es vigorosa y terrorífica, con tendencia a un realismo agresivo, está hecha para inspirar miedo. Sus temas son dioses, monstruos y animales, tallados con una gran energía que sabe expresar el poder de la figura representada. Dominan las leyes de frontalidad y verticalidad, así como una necesidad geométrica de reducir las figuras a un esquema cúbico.











El bajo relieve y la escultura no se dieron en los Mayas con tanta fuerza como en los Aztecas. Lo más característico de su escultura son los monolitos prismáticos, los cuales poseían una altura de hasta 6 metros. los cuales representaban en su mayoría figuras humanas. La cerámica resalta por medio de vasijas en formas humanas y de animales, las cuales son hechas de barro cocido.En ciertos lugares de México como en Bonampak, en el estado de Chiapas, se han encontrado pinturas al fresco que narran con naturalidad y vivos colores, los diversos sucesos que le sucedían en la vida cotidiana, como bailes, rituales, combates, entre otros.

Para los Incas también fue importante la escultura, la cual consistía en labrar sus cultos en materiales muy duros. Realizaron vasijas destinadas a usos normales, pero en ellas se representaban personajes deformes y monstruosos. Para la decoración poseían también motivos geométricos como rombos, cuadrados, triángulos, cruces, entre otros.